NUESTRO ERRORES Ya sé que no suele ser habitual que en política alguien reconozca que en algo nos hemos equivocado… pero los que no tenemos disciplina de partido ni ilustrados asesores “ licenciados en Harvard” , que continuamente nos están imponiendo lo que debemos o no debemos decir, lo que debemos o no debemos hacer, como debemos mirar o hablar a nuestros interlocutores, como deben ser nuestras poses, nuestros gestos y nuestras vestimentas, los que no estamos rodeados de quienes ríen nuestras gracias y jalean nuestras frases, quienes solo tenemos la intención de tratar de ser coherentes con nosotros mismos y con los que nos rodean, quienes solo pretendemos luchar por lo que creemos justo… los que, en definitiva, “no debemos depender de nadie”, tenemos la grandeza y la libertad de poder reconocer abiertamente nuestros errores. La corta historia de AIDU, sin lugar a dudas, no ha sido un camino de rosas, ni de claras unanimidades en nuestras decisiones, ni de grandes acie